El lunes 2 de junio vivimos uno de esos días en los que todo encaja: las ideas, las personas y el propósito. Estuvimos junto al equipo de APE Grupo y Futurea en la presentación de The New Habitat, un informe que analiza cómo cambian los espacios a medida que cambiamos nosotros.
El contenido ya es potente por sí solo. Pero lo que de verdad nos tocó fue otra cosa: la generosidad con la que se ha hecho todo. Desde el acompañamiento riguroso y cercano de Pepa Casado D’Amato y Lucía Marín Forés durante la investigación, hasta la manera en que nos recibió el equipo de APE —Bruno, Cristina, y especialmente José Miguel Pellicer— con atención plena, sin postureo, sin prisa.
Y eso, más que hospitalidad, es cultura. Es una forma de estar y de hacer. Y también una decisión política: compartir este informe de forma abierta y gratuita es una apuesta clara por el conocimiento como bien común. En tiempos de exclusividad y cierre, esto es casi un acto de rebeldía.
Durante la mesa redonda en el COAM —moderada por Juan Francisco Fuentes-Lojo de Diariodesign y compartida con voces potentes como Soledat Berbegal (Actiu), Luis Gallego Pachón y Raúl Téllez Casado (Minor Hotels)— hablamos de presente, pero también de futuro. Un futuro donde el retail físico ya no puede entenderse como simple punto de venta. Lo que hoy se diseña no es solo un espacio, es una experiencia que conecta, inspira y construye comunidad.
Desde Melon Breakers aportamos nuestra visión como referentes en diseño de retail: un enfoque que entiende que el valor de una tienda ya no está solo en lo que vende, sino en lo que hace sentir. Hablamos de cómo el retail se está transformando en una plataforma relacional, donde las personas no solo compran, sino que se encuentran, se cuidan y se reconocen.
También exploramos la fusión de mundos: retail, gastronomía, cultura, hospitalidad... ya no son sectores aislados, sino ingredientes de una misma receta. Hoy, diseñar una tienda es preguntarse: ¿qué lugar queremos ser en la vida de los demás?
Compartimos que ofrecer experiencias culturales o sensoriales no le resta exclusividad a una marca de lujo; la transforma en algo más complejo, más humano y más memorable. Y que la fidelidad ya no nace de lo aspiracional, sino de lo emocional.
Y no olvidamos algo clave: diseñar solo pensando en el cliente es diseñar a medias. En retail, el equipo de tienda es el verdadero embajador de marca, y su bienestar es parte esencial de la experiencia. Si diseñamos espacios que también les cuidan, ellos cuidarán mejor a quienes los visitan.
La generosidad fue el hilo invisible de todo el proceso. Porque cuando se comparte conocimiento sin miedo, se generan conversaciones reales. Cuando se diseña desde lo humano, se construye sentido. Cuando se escucha de verdad, se transforma.
En Melon Breakers queremos trabajar con personas y empresas así: que hacen lo que dicen, que abren procesos, que se atreven a compartir sin estrategia. Porque ahí es donde empieza lo nuevo.
📥 El informe completo está aquí:
👉 The New Habitat – Futurea + APE Grupo
Last Monday was one of those rare days where everything clicks: ideas, people and purpose. We joined APE Grupo and Futurea to present The New Habitat, a report that reflects how spaces are evolving as we evolve too.
The content of the report is strong, but what truly moved us was something else: the deep sense of generosity throughout the entire process. From the thoughtful guidance of Pepa Casado D’Amato and Lucía Marín Forés during the research phase, to the warm and intentional welcome from the APE team —Bruno, Cristina and especially José Miguel Pellicer— who offered us their full attention, with honesty and no rush.
That’s more than hospitality. That’s culture. And it’s also a clear stance: making a report like this freely accessible is a bold commitment to knowledge as a common good. In a world obsessed with exclusivity, this felt almost radical.
At the roundtable at COAM —brilliantly moderated by Juan Francisco Fuentes-Lojo from Diariodesign, and joined by sharp minds like Soledat Berbegal, Luis Gallego Pachón and Raúl Téllez Casado— we spoke about what retail is becoming. No longer just a place to sell, but a space to feel. Today, physical retail is about emotional, cultural and social value: inspiring, connecting, building community.
As Melon Breakers, we contributed our perspective as retail design specialists. We shared how, in our view, physical stores are shifting from transactional spaces to relational platforms. When a brand turns its store into a place where people can gather, feel better and share meaningfully, design becomes a tool for human care.
We also explored how sectors are merging: retail blends with gastronomy, art, and hospitality. Designing a store today means asking: what kind of place do we want to be in people’s lives?
And we challenged the idea that luxury and inclusivity are opposites. Offering cultural, sensory or artistic experiences doesn’t dilute brand value —it deepens it. Loyalty today isn’t built on aspiration alone, but on emotional resonance.
One thing we insisted on: designing only for customers is short-sighted. The retail team is the true brand ambassador, and their wellbeing is essential to the experience. When they feel cared for, their ability to connect multiplies.
Throughout this entire journey, generosity was the invisible thread. Because when we share knowledge openly, we spark real conversations. When we design with people at the center, we create meaning. And when we truly listen, we grow.
At Melon Breakers, we want to work with companies and people like this —the ones who walk the talk, open up processes, and share without fear. That’s where the new begins.
📥 Dive into the full report here:
👉 The New Habitat – Futurea + APE Grupo